Un 13 de agosto de 1999, Colombia sufrió el asesinato de Jaime Garzón, abogado, pedagogo, humorista, actor, periodista, locutor y actor, que es uno de los estandartes e iconos de libertad de expresión en el país.
Thank you for reading this post, don't forget to subscribe!23 años se cumplen del asesinato de Jaime, el cual fue sorprendido en la mañana de ese día en un semáforo de Quinta Paredes en la localidad de Teusaquillo, cuando se movilizaba a Radionet, lugar en el que trabajaba, allí sicarios enviados por el máximo jefe de las AUC (Carlos Castaño), Jorge Eliécer Plazas Acevedo, conocido en el mundo de la inteligencia militar con el alias de ‘Don Diego’, y algunos altos mandos comprobados del estado, como José Miguel Narváez, terminaron con la vida de Garzón, y con ello la sonrisa de los colombianos.
El 14 de septiembre de 2016, se confirmo la responsabilidad del estado colombiano en el homicidio de Jaime Garzón, calificándolo como crimen de lesa humanidad, además de confirmarse que, en el estudio de la vida y costumbres para hacerle seguimiento al humorista, estuvieron el teniente Alexander Parga y los sargentos Guillermo Lozano y Juan José Mosquera.
«En un momento les tendremos las mejores entrevistas de Hediberto de la Calle, y hasta aquí los deportes, ¡País de mierda!, fue la forma en que César Augusto Londoño cerró el Noticiero CM& ese 13 de agosto de 1999, Londoño era compañero y amigo de Jaime Garzón.
Tenía 38 años cuando fue asesinado; recordado por sus personajes como; Louis Rodríguez y Émerson de Francisco en el programa Zoociedad; o Néstor Elí, Inti de la Hoz, el ‘repostero’ William Garra, Godofredo Cínico Caspa y Dioselina Tibaná, además de su proceso como líder social y voz de los que no tienen, lo que lo hacía un hombre muy querido en la sociedad, y lo que lo convirtió en un icono interminable tras su muerte; también fue alcalde menor de la localidad del Sumapaz.
‘Canela’ de César Mora era su canción favorita, esto debido a su constante pensamiento de que seria asesinado, pues varias veces Garzón afirmó a sus conocidos y cercanos, que, entendía que su comportamiento molestaba a personas importantes del país; “En Colombia, la pregunta es: ¿Quién nos va a matar?, ¿Los guerrilleros, los paramilitares, los narcos o los políticos?”. Pero eso no estuvo cerca de detenerlo, pues hasta su ultimo día nunca se quedo callado ante las injusticias que observaba, como si estuviera empeñado a cumplir la letra de esta canción: “Quiero morirme de manera singular, quiero un adiós de carnaval”.
A pesar de su muerte, Garzón se ha mantenido con el tiempo como un icono colombiano y referente de la libertad de expresión, un personaje que es constantemente recordado en las protestas sociales y juveniles, muy acorde a lo que fue su vida, siempre participando, siempre en contra de las injusticias, siempre con proyección de hacer que todos tengan voz; ““Los indígenas tradujeron el artículo 11 de la Constitución: ‘Nadie podrá llevar por encima de su corazón a nadie ni hacerle mal en su persona aunque piense y diga diferente’. Si nos aprendemos este artículo, salvamos este país”, es una de sus frases más recordadas.
Por: Jimmy Nomesqui.