Como parte del proceso de recuperación del espacio público de un sector del barrio San Nicolás, de la comuna Uno, la alcaldía de Soacha, a través de su secretaría de Gobierno realizó un operativo de desalojo de más de 200 predios considerados como invasión.
Thank you for reading this post, don't forget to subscribe!Las familias que habitaban en esta zona tuvieron que abandonar sus viviendas, fabricadas en su mayoría, con elementos como poli sombras, tablas de madera y tejas de lata, y aunque, según Danny Caicedo, secretario de Gobierno, afirmó que los dueños de estos predios fueron notificados anticipadamente sobre la acción que se iba a realizar, esta comunidad indica lo contrario, reiterando no haber sido notificada y aferrándose al hogar improvisado que tenían en posesión.
«Los predios edificados, que cuentan con más de siete años residiendo en esta zona de invasión, se les ha otorgado un tiempo mayor para realizar el debido desalojo. Con tal de que cuenten con un espacio para que se reubiquen».
Danny Caicedo – Secretario de Gobierno de Soacha
¿Qué pasará con estas familias?
Caicedo afirmó que la administración municipal no cuenta con la financiación suficiente para ayudar a todas las familias que residían en estos predios, pero se está ofreciendo todo lo posible para brindar apoyo.
Para garantizar la no vulneración de los derechos de las personas durante el operativo de desalojo, se contó con la presencia de Bienestar Familiar, Migración Colombia, Policía de infancia y adolescencia, además de la secretaría para el Desarrollo Social, la Personería Municipal y la Cruz Roja; acompañados por autoridades como Policía Nacional en función de fuerza disponible, el ESMAD, SIJÍN, Carabineros y otros uniformados, con el fin de evitar problemas que pudieran llegar a riñas entre los habitantes del sector y quienes realizaban el trabajo de desalojo.
¿Por qué vivían allí?
Los habitantes de este sector fueron traídos bajo la compra ilegal de estos predios donde buscaron formalizar su hogar.
«El predio tuvo un costo de dos millones y este es el día en que aun no he terminado de pagarlo, pues he realizado el pago a cuotas. Yo subsisto del producido diario, pues vendo bolsas para la basura, inciensos y algunos productos para el aseo en las calles. Hasta el momento debo setecientos mil pesos del pago de este predio. He intentado incluso contactar con el dueño Humberto Ladín, pero su teléfono permanece fuera de servicio».
Liliana – Habitante desalojada.
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Por: Kevin Sebastián Molina Bernal.