Se trata de Andrés “Manga” Escobar, quien jugó en el fútbol colombiano para Deportivo Cali, Atlético Nacional, Millonarios, Deportes Tolima y Cúcuta Deportivo, y quien ahora deberá cumplir una condena de 2 años y medio por la denuncia de una mujer quien afirmó que el futbolista se aprovecho de su estado de embriaguez para abusar sexualmente de ella.
Thank you for reading this post, don't forget to subscribe!El vallecaucano de 31 años se encuentra en Islandia desde 2021, cuando llegó para convertirse en nuevo jugador del Leiknir de Reikiavik, allí disputó 17 partidos y anotó dos tantos antes de conocerse la denuncia que hoy lo tiene preso.
El colombiano afirmo durante todas las declaraciones que era inocente, en donde argumento tener pruebas de que el acto con la mujer había sido consentido. Este caso llego hasta la Audiencia Nacional de Islandia, en donde el colombiano fue declarado culpable, al no encontrar solidez en los argumentos presentados como defensa.
«Nos encontramos en el centro de la ciudad, veníamos conversando, ella me estaba hablando de lo mucho que le gustaba la cultura de los colombianos y los chicos de color. Decidimos ir a mi apartamento por consentimiento de ambos y pasó lo que debe pasar entre dos personas adultas. Al otro día ella se fue y le dije que me dejara saber cuándo estuviera en su casa, yo tengo los mensajes, al otro día yo vi la chaqueta de ella en el suelo y le escribí que se le había quedado. Ella me dijo que la mamá y el papá iban por la chaqueta, eso me hizo extraño. Sin embargo, le dejé la chaqueta en el lobby y no respondí más, pero al rato llegó la policía”, fue la declaración del futbolista en una entrevista para Win Sport.
El futbolista colombiano ahora deberá cumplir una condena de dos años y medio, esto hasta que un juez de Islandia dictamine lo contrario ante la apelación de la defensa del futbolista, quienes argumentan que esta es la segunda ocasión en la que la chica denuncia a una persona por abuso sexual, en la primera oportunidad el hombre denunciado salió absuelto por falta de pruebas.